Madre de Dios, mira que nuestras familias se están matando

Se acuchillan, se pegan fuego, se arrojan al vacío, se envenenan, se disparan, continuamente hay crímenes en los matrimonios y parejas de nuestro país. Se acrecienta el odio entre hombres y mujeres, las leyes no consiguen poner coto a los crímenes, porque no pueden poner coto al odio. Los corazones quedan desgarrados para siempre con motivo de las separaciones y divorcios, muchos creen que sólo con el crimen se pueden apaciguar sus corazones decepcionados y traspasados.
Madre de Dios, pon remedio a esta situación, pues el demonio nos ha solicitado para cribarnos, destruyendo las familias. Mira los hijos huérfanos por la muerte y las separaciones. Mira que los remedios de las leyes humanas no hacen sino atizar el fuego del odio entre el hombre y la mujer. Virgen de los dolores, sé nuestro socorro.